Señor Director:
Traslado a Punta Peuco.
Han pasado algunos días desde que Canal 13
transmitiera y retransmitiera la grabación del traslado de oficiales del
Ejército en retiro desde el penal Cordillera al de Punta Peuco. Los suficientes
para ponderar fríamente la indignidad cometida con esos ya ancianos soldados.
Existe
hoy en Chile un grupo de personas que no tienen derechos humanos, ni siquiera
el beneficio de ser tratados con la dignidad que es práctica común en las
naciones civilizadas. Y frente a esto, la profundidad del silencio.
A los militares condenados por causas asociadas
a los derechos humanos en años turbulentos del pasado o en la lucha contra el
terrorismo, simplemente se les ha negado el debido proceso y la aplicación
igualitaria de la Ley. Mientras criminales terroristas de ayer gozan de
impunidad, y los de hoy son juzgados por Jueces garantistas, nuestros camaradas
de armas son víctimas de retaliaciones políticas que se manejan abiertamente
desde los Tribunales de Justicia.
La situación es simplemente inaceptable. Ahora
sí se trata de una política sistemática de violación a los derechos humanos de
estas personas, cometida por un poder del Estado con la aprobación y
complicidad de los otros. Hasta tal punto se ha manipulado la conciencia de la
opinión pública, que hoy parece natural que los miembros de las Fuerzas Armadas
y Carabineros estén al margen del estatuto de protección Jurídica que se aplica
a todos los chilenos.
Esta gravísima situación se está extendiendo a
otros compatriotas. Vemos con desazón que en La Araucanía vecinos pacíficos que
han caído bajo el objetivo terrorista, igualmente quedan fuera del ámbito de
protección del Estado. Es el resultado de la política basada en el odio.
Cristian Labbé Galilea, Presidente Directorio
del Centro de Coroneles (R) de Ejército
Señor Director:
Situación en Venezuela.
El miércoles pasado fui a ver el debate “Origen
y Naturaleza del Conflicto Venezolano”, que organizó el movimiento político
Derecho Somos Todos, perteneciente a la Facultad de Derecho de la Universidad
Católica, donde participaron el Senador Alejandro Navarro y el profesor José
Noguera.
Al escuchar la postura del Senador quedé
impactada. Como venezolana que vive en Chile, me he dado cuenta de algo muy
importante en la discusión abstracta y excesivamente política que se ha dado en
el país: las posturas del senador no solamente son desinformadas, sino que tan
desconectadas de la realidad venezolana que causa rabia su ignorancia.
Es muy fácil decir que la oposición venezolana
está siendo oportunista y exagerada cuando uno vive en un país donde no hay
heridos de bala en las calles, donde hay separación de poderes, medicamentos y alimentos básicos en todos los
supermercados, y donde la inflación en los últimos años ha sido estable.
Obviar una realidad y defender con garras a un Gobierno
que ha demostrado su incapacidad de diálogo con represiones de libertades
fundamentales, sólo por ser de “izquierda”, en vez de ser un aporte, es un gran
daño a la discusión del movimiento social en Venezuela.
María Daniela Pedrique.