Señor Director:
Impunidad en la Araucanía
En la edición del 24 de agosto, en el artículo "Araucanía: la impunidad y sus causas", se señala -equivocadamente- que habría vendido un predio a Conadi.
A pesar de los innumerables atentados, me he negado a vender terrenos a esa entidad por considerar que buena parte de sus "transacciones" no son la manifestación de un acto libre y voluntario, sino una ignominiosa extorsión, apoyada en la violencia e, incomprensiblemente, financiada por el Estado.
Osvaldo Carvajal Rondanelli.
Señor Director:
Impunidad en la Araucanía
En la edición del 24 de agosto, en el artículo "Araucanía: la impunidad y sus causas", se señala -equivocadamente- que habría vendido un predio a Conadi.
A pesar de los innumerables atentados, me he negado a vender terrenos a esa entidad por considerar que buena parte de sus "transacciones" no son la manifestación de un acto libre y voluntario, sino una ignominiosa extorsión, apoyada en la violencia e, incomprensiblemente, financiada por el Estado.
Osvaldo Carvajal Rondanelli.
Señor Director:
PEQUEÑAS GRANDES OBRAS, ¿EN CUANTO VAMOS?
En febrero de 2004, pro Apec de ese año, tanto el ex Presidente Ricardo Lagos, como el entonces Intendente Metropolitano Marcelo Trivelli -¡Duro con Lavín!- se lucieron inaugurando la repavimentación de nuestra Alameda, cuya vida útil se estimó en 15-20 años, como para justificar su costo e incomodidades ocasionadas durante la ejecución de los trabajos. ¡Histórico! Un año y medio después, julio de 2005 … “¡Repavimentación!” y otro gran desafío: ¡Terminar con los eventos u hoyos o baches en las calles capitalinas!, catastrados por la sucesora -“¡la victoria tiene nombre de mujer!”- del pintoresco Trivelli, Ximena Rincón (DC) -abogada y connotada lexicóloga-, pero que no pudo realizar por lo oneroso. En 2006, nuevas reparaciones. En agosto-septiembre de 2007, pro XVII Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno de noviembre de ese año, se repararon varias calles de Santiago, eliminando muchos eventos u hoyos o cráteres que se habían convertido en verdaderos íconos capitalinos de: “las cosas se están haciendo bien y las instituciones funcionan”.
Hoy, agosto de 2008, nuestra emblemática Alameda intenta volver en gloria y majestad mostrando los eventos u hoyos que por años la caracterizaron -herencia de la dictadura, ciertamente-, y el SERVIU anuncia nuevas reparaciones, porque los trabajos realizados en 2004 y en 2005 estaban destinados a tener una vida útil sólo de cuatro o cinco años, es decir, hasta 2009, cuando “se enlace” con un proyecto integral de mejoramiento definitivo de la Alameda que está trabajando la Sectra, y que sí debería tener una vida útil de 20 años, según lo manifestó Andrés Silva, director metropolitano de este servicio dependiente del Ministerio de la Vivienda, de una parte; y de otra, la ministra Patricia Poblete se defendió aduciendo que podía hacerse cargo de trabajos realizados antes de su gestión ministerial, es decir, lisa y llanamente no defendió esta parte tan mediática de la gran obra del ex Presidente Lagos, que forma parte importante de la gran obra de los gobiernos de esta des-Concertación allendistadecé reinante, como sí lo hizo cuando debió enfrentar a comienzos de 2006 el escándalo por la calidad de algunas viviendas sociales entregadas, por las casetas sanitarias de 9 o 12 metros cuadrados o casas enanas o de construcción progresiva de la administración anterior y el retraso en la reconstrucción de los pueblos nortinos afectados por el terremoto del 13 de juno de 2005.
De lo que sí la ministra Poblete no podría deslindar responsabilidades, en verticalidad de mando, es de los proyectos pro Transantiago que el SERVIU ha ejecutado, que está ejecutando y que tiene pendiente de ejecución, entre ellos los bullados paraderos, que hicieron tragar saliva el año pasado al director metropolitano Ricardo Trincado. Los subsidios habitacionales, las condonaciones de deudas, la regularización de antecedentes y títulos de dominio … son cuentos apartes, terreno más que propicio para fiscalizaciones, considerando los montos involucrados en ellos
Atentamente,
Jorge Saavedra Moena, c.i. 6.015.115-6
Señor Director:
Simplemente terrorismo.
No basta con hablar de conflicto mapuche. Acá en los hechos y en el derecho lo que hay es una manifestación de acciones terroristas. De estas acciones terroristas se debe hacer cargo el Estado y su aparato de Seguridad. A quien corresponde la seguridad del Estado es al gobierno y en los hechos acontecidos desde ya hace años en el sur , esta siendo sobrepasado el Estado de Derecho. En consecuencia...¿ quien exige al Estado el orden y la seguridad? Esto es más grave que lo que aparenta y el Ministerio del Interior tiene una enorme responsabilidad que debe asumir y si los hechos han sobrepasado al Ministerio, el Ministro debe renunciar.
Saludos Rodrigo González Fernández
www.el-observatorio-politico.blogspot.com