Hace muchos años había un país largo y ancho que
vivía con miedo, con hambre, agotado de humillarse día a día para
obtener un trozo de carne o el pan que debería ser nuestro de cada
día.
Las madres madrugaban y hacían largas filas
arriesgando sus vidas para conseguir algo de leche, azúcar o algún
alimento para sus hijos.
Era un pueblo que caminaba y caminaba porque
habían desaparecido los medios de locomoción por la escasez de
combustible.
Poco a poco el país se detuvo: los colegios, el
transporte, las empresas productivas, los campos... y muchas personas
empezaron a abandonar sus casas y su tierra y empezaron a buscar otros
lugares para dar una vida digna a sus familias.
Por la noche se oían sonar las cacerolas vacías
que sus habitantes golpeaban sin cesar. Se oían las bombas cada vez
coin mayor frecuencia y poco a poco comenzó una guerra entre sus
habitantes que atemorizados, cansados y frustrados sufrían con
impotencia los abusos del gobernante que se rodeaba de una milicia
guerrillera y extranjera para a través de la fuerza someter a todo
aquel que se resistiera o no compartiera su pensamiento.
El gobernante quebrantó el marco constitucional
del país al punto que los parlamentarios solicitaban auxilio, al igual
que todo l pueblo lo hiciera.
De pronto hubo 4 valientes soldados de brillante
armadura y acompañados de sus heroicos hombres que decidieron rescatar
al país que estaba apagado y triste.
Fue una mañana de septiembre en que ganaron los
buenos yel cruel gobernante ante la derrota se quitó la vida,
abandonando así para siempre a todos aquellos que le fueron fieles
hasta el final de sus equivocaciones.
De pronto llegó la primavera al país, el pueblo
se llenó de aromas de libertad y la gente salió a las calles, pudo
obtener su alimento, encender sus luces y los niños volvieron a sus
colegios. Los campos y las industrias empezaron a producir y el país
se llenó de color y tranquilidad.
Los habitantes del país largo y ancho caminaron
tranquilos por las calles y fueron librs para estudiar y trabajar. El
país creció y fue respetado por otros países. Sus habitantes
convivieron en paz hasta que una malvada bruja les mostró un arcoiris,
así como en otro cuento una manzana, y el pueblo fue tras el
arcoiris..., y cayeron en su trampa. La maligna se apoderó de sus
almas, de su dignidad, de sus esperanzas, de su entendimiento, de sus
valores patrios , de sus espíritus.
Y el pueblo ya sin memoria, se volvió contra sus
soldados, los llevó al presidio y los condenó por haberlos liberado de
tanto horror.
Y la bruja roja se apoderó del pueblo, de su
seguridad, de su tranquilidad, de su memoria y su destino....., pero
en este país largo y ancho aún quedan personas que aman sus valores
patrios y respetan a sus soldados y por sobre todo les agradecen su
heroica gesta liberadora del marxismo aquel 11 de Septiembre de 1973.
"CUANDO LA PATRIA ESTA EN PELIGRO SE RECURRE A
DIOS Y AL SOLDADO,
CUANDO EL PELIGRO PASA DIOS ES OLVIDADO Y EL
SOLDADO REPUDIADO"
Verónica Olcay
Nota de la Redacción:
No es propiamente una carta, pero sin duda este texto hará recordar a aquellos olvidadizos lo que realmente ha ocurrido en el país en nuestro pasado reciente.....
