martes, 1 de junio de 2010

Una carta para meditar en serio....


Señor Director:

Todos los estudios indican que el Deber Militar es el conjunto de obligaciones que la Ley impone a las personas que integran una fuerza militar, destacándose entre otros: La subordinación, la obediencia, el valor, la audacia, la lealtad, el desinterés, la abnegación.

El fallecimiento encarcelado de un Suboficial de Ejército hace algunos días, preso político del Estado por cumplir con su Deber Militar al enfrentarse a cedulas terroristas, nos lleva a plantearnos una gran duda: ¿La justicia chilena, está conciente de lo que significa el Deber Militar?

Algunos podrán esgrimir que la Ley otorgaba al Militar fallecido ciertos derechos. ¿Pero de que derechos hablamos? Fue la propia Presidente Bachelet antes de entregar el mando quien le negó a ese hombre el indulto humanitario, sin considerar que padecía un cáncer terminal y que se le habían amputado las dos piernas por una diabetes avanzada, obligándolo a vivir sus últimos días preso, botado en una cama y lejos de sus seres queridos.

¿Quién está equivocado en Chile, la Justicia o el Deber Militar?

¿Qué tipo de Militares queremos?

La tibieza siempre está en pugna con el verdadero espíritu de la profesión militar, pero en Chile el cumplimiento de sus obligaciones para los uniformados, significa vivir penosamente sitiados.

La Concertación en forma sistemática impuso un aparataje judicial prevaricador, el juicio es un mero trámite cuando se trata de uniformados. El Militar siempre es culpable.

Y el actual Gobierno difícilmente va a cambiar eso. Ni siquiera ha manifestado la voluntad de cambiar la política de derechos humanos que recibió por herencia.

Recordemos que el Presidente Piñera negó el indulto humanitario a un anciano General de 83 años con una grave afección cardíaca, prisionero político por defender a Chile del terrorismo subversivo. En otras palabras: por cumplir con su Deber Militar. Y recientemente el propio Gobierno por causas similares pidió a la justicia el procesamiento de otro General, un ex Vicecomandante en Jefe del Ejército, quién desde su cargo no hizo más que cumplir celosamente con su Deber Militar.

¿Qué sería de Chile si estos hombres y muchos más no hubieran cumplido con su Deber Militar?

Los Militares en Chile sujetan su conducta a la disciplina, y ésta se basa en la obediencia, el honor, la moral y el fiel y exacto cumplimiento de los Deberes que prescriben las Leyes y los Reglamentos Militares. Pero si cumplen con eso que es su obligación, se exponen al rigor de una justicia prevaricadora…

¿Entonces que hacen y para qué están los Militares?, y la interrogante más difícil… ¿Cómo tendrían que actuar ellos en algún conflicto futuro?

Gracias a Dios en Chile las Fuerzas Armadas y Carabineros son Instituciones dignas y nobles. Podemos tener la certeza de que los Militares tal como actuaron hace 200 años por obtener nuestra Independencia, y en mil batallas a lo largo de la historia resguardando su terruño y a su pueblo. Tal como enfrentaron la guerra fría defendiendo a Chile del peor de los Yugos. Así también sabrán enfrentar los futuros conflictos. Y también como ahora, sabrán mantener la frente en alto ante a la adversidad, la venganza y el odio.

Solo nos resta pedir al Supremo Hacedor que proteja a Chile de conflictos, evitando así al mismo Chile, el deshonor y la bajeza, de seguir condenando a sus defensores.

Alejandro Russell O’Kuinghttonss