Señor Director:
Alentaron los supuestos Progresistas las más desviadas conductas de los jóvenes en todo ámbito.
Hicieron del los principios burla y relativizaron la moral subordinándola al placer. Aún hoy, el BancoEstado que no tiene mayor interés en prestar plata a las Pymes, paga por un aviso feo que busca demoler el respeto y amor por don Bernardo O'Higgins y el Héroe Arturo Prat.
Los supuestos opositores callaron, dejaron hacer, concentrados quizá en atender sus legítimos negocios. Fue muy ilegítimo haber tomado compromisos de responsabilidad pública siendo que no le podían dedicar más que un "part time".
La jerarquía católica calló o, cuando sacó una voz tímida y acomplejada, fue para disculpar a sus adversarios y para exculpar a sus declarados enemigos hasta al asesino de un sacerdote en ejercicio ministerial.
Ahora viene la histeria, ¿qué hacer con tanto joven criado a potrero como potrillos y potrancas, alentados a proceder de modo animal desde el ministerio de "salud" destacado no por los hospitales sino por los condones y las píldoras que tal vez sean abortivas?.
La solución que plantean los poderosos es inhumana, ahora penalizan las conductas alentadas. Ahora temen al que ayer abandonaron a deformarse a su placer y antojo.
Llaman la ira de Dios, y en eso estamos. Los volcanes no se manejan solos, los aviones no se caen sin su permiso ni los accidentes proliferan. Las economías jaguar no decaen de súbito y "!sin motivo", sin que haya Mano Poderosa que lo mande o lo permita. Vamos de cabeza a nuestro mal, mal que hemos buscado con estulta porfía y contumacia activa. El comunismo ronda, el autoritarismo cualquier día ofrecerá sus "productos". Culpables hay, que nadie lo soslaye ni lo olvide.
Roberto Finat
